No, yo no estoy a tres metros sobre el cielo. Yo tengo los pies encima de la tierra. A días en tacones, para llegar más alto; otros en deportivas, para descansar; también descalza, para sentir. A veces piso tan fuerte que me clavo en el suelo y no puedo seguir andando. O me pesan los pies. O me lloran... pero fíjate, a mí todavía no me han salido alas.
Y eso que dicen que la realidad supera la ficción.
Bueno, poco a poco. El caso es que a veces te das cuenta de que las cosas es mejor sentirlas desde la tierra, no es necesario estar a tres metros sobre el cielo para sonreir :)
ResponderEliminarYo tampoco he visto la pelicula aun, ni se si la veré, a pesar de haber leido el libro.
Cierto, Lorena. Sintamos desde la tierra, desde nuestra realidad...
ResponderEliminarUn saludo.
A mí estos días creo que me va a convenir no sentir demasiado, ni cielo ni tierra, me voy a concentrar en respirar:) y el meme... fue simpático hacerlo:) un besooooooo
ResponderEliminarSon cosas que pasan :_
ResponderEliminarEs lo que tiene pecar un poquito de tonta, que vivimos aferradas a lo que somos, aferradas a la realidad. Nuestro corazón no necesita alas porque es capaz de sentir y llegar a lo más alto sin volar. Un beso :)
ResponderEliminarNo siempre se vuela con alas, y 3 metros... podrían convertirse en pocos ^^ sobre todo teniendo en cuenta todos los que hay por encima del cielo... no crees? =)
ResponderEliminar